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Marín Lara, convencido de su inocencia y de que la causa será archivada

Marín Lara, ojeando esta misma mañana el ejemplar de La Gaceta del Lunes en el que se publicó el parte policial. // CharryTV

Fue denunciado por el Presidente de NNGG por la publicación de un parte policial en "La Gaceta del Lunes" después de que éste fuese sorprendido por la Policía Local repartiendo panfletos alusivos a la figura del primer edil.

El Alcalde de la ciudad, Antonio Mª Marín Lara, ha declarado hoy ante la titular del Juzgado número 3 de Ronda por una posible vulneración de la ley de protección de datos, a consecuencia de la denuncia interpuesta por el presidente de Nuevas Generaciones del Partido Popular, Juan Vega, tras aparecer publicado en la revista “La Gaceta del Lunes”, vinculada al primer edil, un parte de novedades de la Policía Local que hacía referencia a su persona. Y es que el presidente de Nuevas Generaciones fue sorprendido meses atrás por efectivos policiales cuando, de madrugada, se encontraba repartiendo panfletos alusivos a la figura del propio Marín Lara, así como del Secretario General del PSOE, Francisco Cañestro.

Jesús Vázquez, concejal del Partido Popular, hacía alusión esta mañana en los micrófonos de Canal Charry TV a "las malas artes del Alcalde al publicar datos personales de Juan Vega en la revista, ya que un parte de la Policía Local es totalmente secreto". También realizó declaraciones Antonio Mª Marín Lara, que ha calificado el asunto como "una chorrada", al tiempo que acusó a los populares de "intentar invertir la noticia, ya que quien fue sorprendido repartiendo panfletos insultantes hacia su persona, su compañero Francisco Cañestro y su familia no fue otro que el propio Juan Vega".

Además, quiso aclarar que pese a su vinculación con la revista, "no es directamente responsable de esa publicación" y que se muestra "tranquilo y convencido de que la causa terminará siendo finalmente archivada". El primer edil explicó que los partes policiales se derivan a la Delegación de Seguridad, y que no sabe cómo los datos policiales acabaron en manos de los redactores.